Este ensayo trata de proponer una serie de lecturas acerca de distintas manifestaciones artísticas, surgidas a lo largo del siglo XX, que no pueden entenderse sin una perspectiva transversal que tenga en cuenta los símbolos, signos y significaciones que la sociedad ha ido imprimiendo a las representaciones de la sexualidad y, por ende, a las que se atribuyen a hombres y mujeres. Estas cuestiones de género son cambiantes y están sometidas al discurrir de los avances sociales, políticos, científicos y culturales que han ido modificando los papeles que se adscriben al sujeto moderno y contemporáneo, que carecería de imagen y representación visual sin el empuje de los diferentes movimientos feministas. También es destacable el estudio de la temática gay/ lésbica, y el impacto de la reciente teoría Queer, que cuestiona la existencia de identidades fijas en relación con los comportamientos y las orientaciones sexuales.

es un proyecto editorial que surge desde el área de artes visuales del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, ante la necesidad de abrir espacios equitativos de divulgación para mujeres creadoras en el campo de las artes visuales. Más de ochenta mujeres son parte de esta publicación. [Página web]

Esta obra analiza la tradición histórica y las nuevas propuestas del reciente arte feminista, y, al estudiar como se producen las imágenes del cuerpo femenino consideradas aceptables o no, dinamiza el debate sobre los límites entre cultura y la pronografía.

"La exopsición reúne cerca de setenta obras de cuarenta creadoras de América Latina,- a través de la participación de prestigiosas colecciones privadas, museos e institucionales provenientes de nueve países-, junto a una selección de artistas nacionales pertenecientes a la colección MNBA, aportando al diálogo curatorial y representativo de escenas que, lejos de ser aisladas, se complementan y vinculan desde diferentes artistas." -- Página 14

La relación entre feminismo e historia del arte, cuyos orígenes se remontan al siglo XVIII, supone una renovación profunda en el campo de la teoría y la práctica artísticas, con intervenciones, a menudo polémicas, no sólo en el ámbito académico e institucional, sino en el propio pensamiento feminista. La autora investiga la historia olvidada de las mujeres artistas y cuestiona muchas de las categorías fundamentales -como las de "genio artístico", "calidad" o "influencia"- sobre las que se asienta la disciplina de la historia del arte en su conjunto.